Muebles ligeros o de estructura alámbrica combinados con piezas Mid Century Modern como la silla Eames del escritorio , materiales naturales y plantas, también en el baño donde además una bañera vintage y unos azulejos tipo metro completan una lista de tendencias muy actuales y de estilo escandinavo. Así es esta vivienda perteneciente a un nuevo bloque de adosados construido junto al lago Ekoln y rodeado de naturaleza, Vårdsätravik, al sur de Uppsala, Suecia. Una zona rural y tranquila, con una cómoda distancia a la ciudad.
Las ventanas se enmarcan con una carpintería de color negro al interior, reforzando el concepto de encuadre para las vistas del entorno idílico que rodea la casa. En Escandinavia, donde hay poca luz natural, no es extraño prescindir de persianas y cortinas y cuando además el entorno se presta a ello, las ventanas funcionan como marcos del paisaje.
Como es habitual en este tipo de decoración, el punto de partida es un lienzo blanco en las paredes con un ligero toque de color en los pavimentos, en este caso mosaicos hexagonales en baño, alfombras con dibujos geométricos y maderas claras en el resto de la vivienda.
La paleta de colores neutros, predominantemente en la gama del blanco al negro (grises), con detalles terracota como la bañera vintage con patas, la colcha de cama y algún que otro detalle (cojines, azulejos…), es una constante que unifica la decoración en toda la vivienda.
También es una constante en toda la vivienda la decoración de las paredes con fotografías artísticas, en algunos casos remarcadas en negro como las ventanas (dormitorio) y en otros en blanco (sala de estar), siempre de forma asimétrica.
Una cocina con encimera de piedra caliza, impecable y funcional, invita a cocinar y a la vida social.
Fuente imágenes: Blooc