Los televisores son cada vez más planos y de mayor superficie. LCD-TFT o televisores de plasma, con estructura negra la mayoría, blanca algunas veces, apoyados en un mueble o colgados de la pared, en casi todas las casas hay al menos uno.
Y a no ser que la decoración sea de tipo futurista o ultra-moderna, a menudo resultan elementos discordantes y la solución suele pasar por ocultarlos a la vista, detrás de un panel o dentro de un armario.
Pero no hay porqué ocultarlos. Una forma creativa y fácil, que no minimalista, de integrar los televisores de plasma en la decoración, ya sea una decoración de estilo rústico o country, natural, vintage, shabby-chic, nórdico, o cualquier otro estilo es… ¿lo imaginas?
El truco es incluir la TV dentro de una composición de cuadros en la pared, para alejar el foco de atención de la pantalla negra y hacer que sea un elemento más en la composición, una composición que puede estar hecha de fotografías, pinturas, carteles, ilustraciones, grabados, mapas o marcos, donde la TV formará parte del conjunto.
De esta forma,los televisores de plasma encajan mucho mejor con la decoración de cualquier sala y, cuando los enciendes, son como marcos digitales, cuadros animados en tu galería personal. Fíjate en estos otros ejemplos: